Otra vez la burra al trigo
Voy a empezar confesando que no tenía ganas de escribir esto, es más ni es viernes y la verdad iba a compartir una tira sobre el sexo casual y eso iba a ser mi comentario de la semana. No sólo es que me sienta cansada y sin ganas de tocar el tema sino que llevo una racha diminuta de días buenos (los cuales espero se extiendan un rato) y no sabía si iba a poder ponerme seria 30 minutos y hacerle justicia a lo que vengo a escribir. Pero bueno, supongo ya saben…Lesvy Berlín Rivera Osorio, una mujer como mis compañeras de Bien Chicles, como yo, como mis amigas y aliadas. Una tragedia, podría haber sido cualquiera de las compañeras de CU y creo que el caso sólo empeora gracias no sólo a los comunicados de la PGJ, que antes de lamentar su deceso nos dio un detallado informe de su vida personal, sino también a las lamentables reacciones de los espectadores en cuanto a varios puntos que deseo tocar a continuación.
1. ¡Ay, pero si los hombres también nos estamos muriendo y por nosotros no hacen ninguna marcha!
¡PFFFFFF! Cuando fue lo de Atenco marchamos unidos, cuando fue lo de Ayotzinapa marchamos unidos ¿Dónde estaban ustedes en CU? ¿Limpiando letras? Muy aparte de esto en algún momento les tiene que caer el veinte que la forma en que la violencia afecta a los hombres es muy diferente a la que afecta a las mujeres, a los hombres los matan en su mayoría espacios públicos con arma de fuego mientras que a las mujeres las matan en casa y no sin antes ser torturadas, violadas, desfiguradas y desechadas en algún relleno sanitario. Los programas de seguridad pública por lo tanto están pensados en su beneficio y claro se tienen que hacer programas específicos para violencias específicas como es el caso de las mujeres. Aparte de esto es muy curioso que justo a penas encontraron otro cuerpo en CU (o sus alrededores) y mientras nosotras como colectivo nos preocupamos por la muerte de Lesvy los hombres aprovechan esta otra muerte para preguntarle a las mujeres que para cuándo vamos a salir a marchar por este individuo cuya muerte también es lamentable, por qué no mejor se preocupan por su nombre, por cómo murió, por hacerle justicia. ¿Por qué el mayor esfuerzo que tienen que hacer es dirigido a atacar al movimiento feminista en lugar de preocuparse por la vida del otro?
2. No TODOS los hombres somos así #SadFace #SadHombre
Va, se las concedo jaja. No todos los hombres son así e imagino que si se debe sentir culero ir caminando por la calle en la noche y que todas las mujeres por default se cambien de banqueta o apresuren el paso, pero imaginen el número de mujeres que han experimentado algún tipo de violencia por parte de un hombre a lo largo de su vida que sintamos la necesidad en automático de cambiarnos de banqueta cuando los vemos caminando hacia nosotras. No, no todos los hombres violentan ni matan ni violan pero sí los suficientes como para que, como mujer, una casi casi nazca con la necesidad de protegerse y para que 2 de cada 3 que nacemos sea 100% seguro que seamos víctimas de algún tipo de violencia.
3. El asunto de las letras de la UNAM
Este amarguísimo episodio para la vida cultural de la UNAM (jaja) me recuerda a la marcha feminista en la que se pintaron consignas sobre el anti-monumento de los 43 de Ayotzinapa, todos indignadísimos por el asunto pero seamos honestos: ¿Si hubieran sido 43 mujeres habría monumento? Y entonces cuando dicen que es la lucha de todos ¿lo es realmente o sólo lo es porque se trata de un grupo de hombres? Por qué cuando se hicieron las marchas contra Peña Nieto, por la reforma educativa y hasta la del 2 de octubre nadie tuvo problema con las pintas que se hacen en la calle, por qué a huevo cuando una mujer está en el espacio público luchando por SUS derechos y lo transforma como acto de protesta se les tienen que poner los pelos de punta y no cuando una mujer muere en ese mismo espacio. ¿Será que ustedes todavía piensan en las mujeres como algo perteneciente a la esfera privada? Así como ustedes se quejan de que no hay un manual del buen comportamiento durante una marcha no vengan a tratar de decirnos cómo indignarnos por la vida de nuestra compañera. Así como nosotras pegamos pósters e hicimos retratos de cada uno de los desaparecidos en Ayotzinapa ustedes al menos tengan la decencia de dejarnos escribir su nombre en donde se nos dé la gana ¿o sólo cuenta si uno de ustedes se muere o lo desaparece el narco o la policía?
La verdad es que ya me dieron hueva sus comentarios, su mentalidad, todo. Es otra vez la burra al trigo.
Bai