por Quetza

Una de mis actividades favoritas cuando estoy en facebook es bloquear y ocultar contenido. De principio debo decir que de todas las redes sociales que uso, facebook es la que menos me gusta revisar. Usualmente sólo lo abro muy brevemente para checar mis notificaciones y ver uno que otro artículo o meme que no haya visto antes en twitter o tumblr, y hago énfasis en «brevemente» porque para mí, entrar a facebook significa entrar al infierno de la controversia y el sin sentido, y entre más pronto salga de ese lugar, mucho mejor. Claro que esto no es una característica única, prácticamente cualquier lugar en el internet es así, pero de alguna forma facebook se ha convertido en una especie de filtro que sólo deja pasar o las cosas más irrelevantes o las más problemáticas. Uno puede perderse en un mar de bebés desconocidos, remedios caseros y conversaciones ajenas o, en el peor de los casos, en publicaciones misóginas, homofóbicas y racistas.

No podría contar el número de veces que me he sentido tentada a empezar un thread de discusión cuando leo ciertas publicaciones, y sería ingenuo pensar que voy a poder navegar en internet sin toparme con este tipo de cosas, es por eso es que agradezco que facebook nos de la muy diplomática opción de esconder y silenciar contenido en lugar de iniciar controversias eternas y terminar eliminando «amigos», porque para borrar publicaciones tenemos que darnos cuenta de que están ahí, y muchas veces eso significa caer en cuenta que todas las cosas que jamás pensamos iban a salir de la boca de algún conocido, amigo o familiar se manifestaron en forma de comentarios hirientes o memes de mal gusto. Supongo que es cierto eso de que en internet no hay secretos.

Si bien creo que es importante estar consciente del discurso del otro, a veces subestimamos el daño que nos hace el estar expuestos a tantas cosas negativas, por eso es que considero tan importante y necesario que al menos en las redes sociales cada quién tenga la oportunidad de deshacerse de las cosas que le resultan tóxicas, porque en la vida real no es tan fácil alejarse de la gente indeseable o simplemente darse la vuelta e irse cuando una conversación se torna incómoda.

De vez en cuando es bueno darse un descanso del bombardeo mediático al que estamos sometidos todos los días e imaginar que vivimos en una sociedad armoniosa, de cualquier forma, si empezamos a sentir que nos estamos alienando del mundo con tanta buena onda, existe la opción de echarnos un clavado a la sección de comentarios de cualquier periódico, que siempre estará ahí para darnos nuestra dosis diaria de realidad.