Un poema de «Circo Infierno»
Tinnitus
Grito:
evapora entre mis manos las estrellas
cruje la noche
azul etéreo
enloquecido descanso de las ramas.
Recorre los horizontes de la lengua
silencio hinchado
brevedad de pirámides sobre flujos del inhumano espíritu,
atormentadas células
relámpagos que perfumaron cantos guturales.
Tuve nunca un dolor imprevisto
estruendo aprehensivo del tímpano.
La vida es un suspiro de cenzontle
descorpórea
azulea
oratoria de ojos
canción de humo
oxidándose los picos rabiosos inmemorables de fiebre,
alas gimiéndose cuatrocientas voces,
rosas que amenazaron con destrozarme el pálpito,
solo el lenguaje de pájaros es comprensible
unánime:
Mimus polyglottos
mimus corpórea,
mimus divinus,
mimus nympha,
mimus votum Deus,
mimus vatis,
mimus fatum,
Alis volat propriis.
Ad perpetuam rei memoriam:
“Monstrum in fronte, monstrum in animo”.
Nox caeruleus,
carnis castrare,
astrum terra,
ales ocûlus
palma
palma
alma
alae,
aléy, éyy,
faui, faui, faui,
iley, iley,
fieu, fieu,
iu, iu,
ú,
faui,
aui, aui,
ui, a, ui, ai,
íley, iléy, ileý,
fieu, fieu,
ieu, ieu,
ie,
ie, ie,
ieu, ieu,
iu,
iue, iue,
ii
iiú, iiü,
i,
iieu,
ii, íí,
i, i
i.